Solicitud de no renovación de una póliza de seguro

Cualquier usuario que no quiera renovar una póliza de seguro debe cubrirse de posibles situaciones no deseadas elevando una petición formal que deje constancia de la situación ante la empresa aseguradora para evitar el cobro de futuros recibos.

Obligatoriedad del documento de no renovación de una póliza de seguro

El envío de una carta de no renovación es esencial si se quiere elevar una solicitud formal que deje constancia del deseo de interrumpir cualquier póliza de seguro que se haya firmado. El usuario está obligado a notificarlo de forma clara y concisa ya que, lo contrario puede suponer la renovación automática de los servicios contratados y el cobro de las cuotas establecidas en el contrato. Así, el documento en cuestión debe hacerse llegar a la compañía de seguros de forma que quede constancia de ello, por lo que el uso del burofax es muy recomendable.

Consecuencia de su envío

Esta petición legal tendrá como consecuencia la extinción de los servicios contratados de forma efectiva, siempre y cuando se respete el plazo acordado con la aseguradora en el contrato firmado. La falta de su envío o una mala redacción del documento harán que la póliza de seguro siga vigente y que se realicen cobros relacionados con su abono, algo que puede, incluso, incluir la renovación automática de la misma. Se aconseja acompañar la solicitud de un extracto que acredite estar al corriente de los pagos y guardar una copia certificada, ya que puede servir como prueba ante distintos procesos legales.

Si se desea acabar con una póliza de seguro se debe interponer una solicitud formal para ello, un documento en el que se deje clara la situación para evitar que la compañía aseguradora siga cargando los gastos que genera este servicio al usuario que no lo desea. De igual modo, este documento impide la renovación automática de la póliza, por lo que es de gran utilidad.