Un trabajo de pocas horas es mejor que estar sin hacer nada
Acceder al mercado laboral no resulta sencillo, especialmente para los jóvenes poco experimentados que buscan un empleo acorde con su formación. Habitualmente, firmar un contrato para aceptar un trabajo de pocas horas es la única alternativa posible. Lejos de ser un paso atrás, puede suponer una excelente oportunidad para convertir en permanente ese puesto temporal.
La opción de aprovechar un trabajo de pocas horas
Todos deseamos un trabajo motivador, bien remunerado y adecuado a nuestra preparación. Pero no suele ser sencillo: las oportunidades laborales interesantes escasean y los empleadores se resisten a contratar a personas poco conocidas. Sin embargo, firmar un contrato para un trabajo de pocas horas ofrece la posibilidad para demostrar nuestra cualificación, darnos a conocer y ganarnos la confianza de los responsables de la contratación en la empresa. Además, ocuparemos nuestro tiempo de manera productiva, desarrollando nuevas habilidades y ampliando nuestra red de contactos, la mejor fórmula para encontrar nuevos trabajos. Asimismo, nuestro currículo quedará ampliado y recibiremos una pequeña remuneración que siempre viene bien.
El precontrato de trabajo en los empleos temporales
La firma de un precontrato de trabajo a la hora de acordar un trabajo de pocas horas puede convertirse en un estímulo adicional para el empleado. En ocasiones, la empresa ofrece la posibilidad de una oferta laboral posterior si ese trabajo temporal se culmina satisfactoriamente. Al margen de estos casos, el precontrato de trabajo es una promesa de relación profesional futura, firmada por ambas partes, que constituye una prueba fehaciente capaz de generar responsabilidades. Acudir a un profesional para redactarlo en los términos correctos es fundamental para evitar imprevistos.
Aceptar un trabajo de pocas horas es una oportunidad para entrar en el mercado laboral de una manera práctica, hacer currículo y ampliar nuestra red de contactos. En cualquier caso, la firma de un contrato o un precontrato de trabajo es una garantía adicional de legalidad y fiabilidad.