Comprar material de segunda mano: mejor a un particular directamente
Comprar o vender material de segunda mano entre particulares es una gran forma de encontrar mejores precios y otras ventajas. Todo ello siempre que se haga dentro de los márgenes legales respetando lo que la legislación dice sobre este tipo de acuerdos.
Ventajas de comprar material de segunda mano
El acuerdo entre iguales para disfrutar de material de segunda mano obtenido directamente de una fuente particular es una fuente de beneficios para las partes de dicho acuerdo. Para empezar, existe la posibilidad de entablar un periodo de negociación en el que los precios se ajusten al máximo, algo imposible de hacer en el mercado común en el que grandes empresas fijan los costes de las operaciones. Por otro lado, la oferta suele ser mucho mayor y más flexible, algo que permite encontrar productos o bienes que se encuentran ya disponibles en otros canales de venta más mayoritarios.
La importancia del contrato
Pese a realizarse entre iguales de forma amistosa, el contrato de compraventa es fundamental a la hora de dar validez legal a un acuerdo de este tipo. Cualquier material de segunda mano con el que se comercie es susceptible de generar impuestos y otras obligaciones que deben ser declaradas íntegramente. De igual forma, por ejemplo en el contrato de compra de un coche de segunda mano, el documento debe recoger de forma obligada el periodo de garantía asumido por la parte vendedora. Este no debe ser inferior en ningún caso a un año, aunque no está de más que se especifique el periodo en el contrato.
En definitiva, la compra o venta de material de segunda mano entre particulares es una gran opción para disfrutar de grandes precios y otras ventajas similares. No obstante, esto debe hacerse siempre contando con la legalidad vigente y plasmando todos los detalles del acuerdo en un contrato que evidencie hasta en el más mínimo detalle todo lo referente al acuerdo alcanzado.