Hasta las grandes empresas recurren a la subcontratación

Son muchas las empresas que recurren a la subcontratación, un sistema de trabajo que terceriza actividades de soporte a la actividad principal. Las principales razones son económicas y técnicas, aunque también existen motivos logísticos y condicionantes derivadas del crecimiento empresarial.

¿Por qué tercerizar servicios?

La realidad muestra que hasta las grandes empresas recurren a la subcontratación, conocida en la jerga empresarial como ‘outsourcing’ o tercerización de servicios. En la industria se tercerizan diversas actividades, principalmente cuando se necesitan piezas especiales o tecnologías que la empresa no posee. El área comercial de muchas empresas, además, se complementa con la contratación de call centers o empresas de telemarketing. Es imprescindible acordar todos los puntos del servicio y documentarlos correctamente, para evitar malos entendidos y problemas futuros, como reclamos de pagos o servicios incorrectos. Un contrato profesional puede evitar malentendidos, grandes gastos en abogados y juicios interminables.

Ventajas y desventajas de la subcontratación

La subcontratación ofrece numerosas ventajas a la empresa. Una muy importante es permitir a los empleados cualificados centrarse en su trabajo, mejorando su productividad. Además, es posible acceder a expertos para determinados trabajos o situaciones, sin tener que contratarlos en dependencia de la organización. De ese modo, estos gastos fijos se convierten en variables y, a la vez, se reciben ideas innovadoras desde fuera de la empresa. Las desventajas podrían verse en los casos de internacionalización empresarial, ya que tal vez al subcontratar servicios en el extranjero se pierde algo del control sobre los procesos de producción, entre otros aspectos.

Gracias al sistema de la subcontratación de servicios es posible acceder a trabajos especializados, ahorrar costes y favorecer que el personal de la empresa se centre en su actividad. Para que toda tercerización se desarrolle adecuadamente, es imprescindible establecer los puntos pactados en un documento profesional específico para cada contratación, que permitirá ahorrar tiempo y dinero frente a cualquier malentendido.