Recurrir a un Independiente para administrar sus tareas administrativas
En lugar de contratar, en estas situaciones es más que interesantes recurrir a la ayuda de un independiente, algo que debe hacerse de forma totalmente legal. No son pocos los casos en los que una empresa necesita una ayuda puntual para un proyecto concreto.
Las ventajas de contar con un independiente
Recurrir a un trabajador autónomo especializado en un área concreta es una vía que muchas compañías emplean para solventar situaciones puntuales por sus ventanas. Para empezar, se debe asumir que este profesional se encargará de una tarea administrativa dentro de un proyecto global de mayor tamaño. El resultado es que estos trabajadores aportan una capacidad de trabajo envidiable y una objetividad que ayuda a las empresas a obtener mejores resultados. Por otro lado, la relación entre ambas partes estará sujeta a la elaboración de un trabajo en concreto, lo que no obliga a realizar contrataciones que no sean necesarias para el futuro.
Aspectos de importancia
Sin embargo, todo este proceso debe estar sujeto al derecho laboral vigente, algo que debe quedar a las claras en el acuerdo de colaboración que la empresa firme con el independiente. Para ello siempre es aconsejable redactar al detalle un contrato de prestación de servicios. En este documento se detallarán aspectos tan concretos como el tipo de labor que el profesional llevará a cabo, los medios que debe poner para ello o el plazo de realización de las tareas. Todo ello es fundamental para que la contratación de este tipo de profesional sea eficiente y cumpla con la normativa necesaria.
Si se sigue el proceso adecuado, contar con un independiente es una de las soluciones más eficientes de todas las que están al alcance de una empresa. Productividad, ideas originales y máxima disponibilidad del trabajador son algunas de las ventajas que tiene este tipo de contratación, razones que han hecho que sean muchas las compañías que ya hayan apostado por ello.