Reducir el importe de los impuestos de empresa invirtiendo en una asociación sin ánimo de lucro.

Las empresas tienen una serie de beneficios a la hora de colaborar con una asociación sin ánimo de lucro. Uno de los principales es reducir el importe de los impuestos a pagar en cada ejercicio, algo que debe tenerse en cuenta.

Colaborar con una asociación sin ánimo de lucro

No son pocas las empresas que deciden dedicar una parte de su presupuesto a obras sociales por causas meramente humanitarias. Pues bien, esta situación no deja de tener sus ventajas fiscales siempre que se observe un estricto cumplimiento de la legislación vigente, algo para lo que conviene contar con un asesoramiento previo por parte de profesionales. La reducción de la carga impositiva que las compañías pagan en cada ejercicio es una de las grandes ventajas de la colaboración con una asociación sin ánimo de lucro, una oportunidad de destinar el dinero a causas nobles y, además, recibir una compensación por ello.

Algunos detalles importantes

El porcentaje que se deduce depende en gran medida del derecho fiscal establecido en cada momento. No obstante, las personas jurídicas suelen reducir las cargas más que las físicas. Por otro lado, hay que tener cierto cuidado con la organización con la que se desee colaborar. Lo principal es conocer que realmente se trata de una organización sin ánimo de lucro, ya que de lo contrario no se tendría derecho a la deseada reducción. Lo mejor para ello es consultar los estatutos de dicha organización, documento en el que debe aparecer a las claras la naturaleza y el tipo de actividad desarrollada por la misma.

En definitiva, colaborar con una asociación sin ánimo de lucro o con varias es un buen método para conseguir pagar menos impuestos sin incurrir en ninguna falta. Lo que sí hay que tener en cuenta es que las organizaciones cumplan con este requisito, algo para lo que es de gran utilidad revisar a conciencia sus estatutos vigentes en el momento.