Distintas profesiones cuyo ejercicio está prohibido en un local comercial ordinario
La actividad que se vaya a desarrollar en un local comercial debe ser fijada en un contrato que firmen el propietario y el arrendador, habiendo una serie de profesiones que quedan prohibidas por su naturaleza molesta, nociva o insalubre.
Actividades prohibidas en un local comercial
El alquiler de un local comercial se basa en el contrato firmado por las partes intervinientes, y en él ya se especifica a qué actividad se va a destinar el espacio alquilado. Así, si el arrendatario no falta a su palabra y respeta los términos de su contrato, el negocio siempre será respetuoso tanto con los deseos del propietario como con los estatutos de una determinada Comunidad (en caso de que la haya). Las actividades molestas, nocivas o insalubres están prohibidas para evitar ruidos, emisiones de gases, olores o ataques contra la salud de las personas del entorno.
Motivos de prohibición de negocios en locales comerciales
Algunos de los motivos por los que un determinado negocio no pueda ser desarrollado en un local comercial se derivan del simple principio de convivencia. Por ejemplo, si el local se halla ubicado en una Comunidad de propietarios, es imperativo respetar los estatutos de esta. Otro de los factores que rige el acuerdo entre propietario y arrendatario es la adecuada conservación del inmueble alquilado; de ahí la importancia de que en el contrato de alquiler se especifique la actividad profesional que se va a desempeñar. Por último, pueden existir también razones de tipo moral, de salud o de protección del medio ambiente.
En definitiva, la profesión que se vaya a desempeñar en un local comercial debe estar estipulada en un contrato de arrendamiento de local, que fije las bases de la relación entre ambas partes y vele por la buena conservación del inmueble. Solo con un documento legal firmado se pueden respetar los intereses de los intervinientes y dar un uso controlado al local en cuestión.